Un reemplazo para el diablo - Capitulo 23
Con sus manos levantadas y una gran sonrisa en su rostro el sacerdote de la iglesia recita con devoción las últimas alabanzas de la misa del día de hoy. Sus fieles ovejas agachan la cabeza en señal de oración mientras piden a la deidad de su culto que les traigan felicidad y prosperidad una vez más. Alicia al igual que este fiel séquito reúne sus sueños y esperanzas en una oración dirigida hacia el cielo. A su lado están los niños quienes pese a no entender lo que implica un culto religioso imitan a los adultos y mantienen una postura de respeto mientras fingen orar. Luego de esta breve oración final los creyentes se colocan de pie y se despiden con una reverencia del sacerdote para posteriormente marcharse del lugar con alegría; como si los hubieran liberado de su castigo de fin de semana. Alicia termina su oración final y mira a su lado a los niños quienes estaban jugando en sus asientos; pedirle a unos infantes que se mantengan serios cuando los adultos no lo son sería mucho pedir.
—hermaita ¿ya terminamos…? —pregunta la pequeña Susan recostada en su asiento, aprovechando su pequeña estatura tiene la oportunidad de usar cualquier superficie como cama
—si…, ya hemos terminado— contesta Alicia con cierta tristeza en su voz, sabe perfectamente que saliendo de la iglesia deberá llevar a los niños de regreso a ese orfanato del infierno. Tras despedirse con una ligera sonrisa del sacerdote, Alicia toma la mano de la pequeña Susan y seguida por los demás niños camina en dirección a la salida. A medida que se aproxima a la puerta siente como sus pisadas se vuelven más y más pesada debido a la culpa
— ¡¡¡esperen…!!!— grita una persona desde el interior de la parroquia justo antes de que Alicia abandone el lugar; quedando ella y los niños debajo de la entrada
—padre Joshua— dice Alicia con sorpresa al ver a un anciano con hábito sonreir mientras se acerca a ellos, se trata del sacerdote en jefe de esta humilde iglesia quien se ve feliz de verlos
— sabía que mi vieja mirada no me engañaba, la pequeña Alicia ha crecido bastante— contesta el anciano deteniéndose enfrente del grupo
—es bueno saber que aún se encuentra saludable padre — contesta Alicia con una ligera sonrisa sincera, aunque odia al personal del orfanato donde creció, el clérigo de la iglesia adjunta es otro tema, ellos nunca trataron mal a los huérfanos y en algunas ocasiones incluso los defendieron ante los abusos de las monjas cuidadoras, motivo por el cual ella tiene cierto afecto hacia los miembros de esta institución, especialmente de Joshua como líder espiritual
—¿que ha traído a esta oveja perdida de regreso a mi rebaño? — pregunta el anciano con curiosidad
— he venido a traer de regreso a los niños al orfanato, los seis días que se me permite sacarlos al mes finalizan el día de hoy — dice la joven con pesar
— entiendo…, es una verdadera lástima- dice el anciano comprendiendo la situación, aunque en varias ocasiones a denunciado a los administradores del orfanato por abuso infantil las autoridades nunca le han hecho caso, motivo por el cual entiende la tristeza de Alicia — rezaré por los pequeños indica el sacerdote con melancolía
—Ja.., como si rezar hubiera servido de alguna vez. Ese santurron del cielo rara vez hace su trabajo, por lo que es más probable ganarse la lotería que ser escuchado por aquel que ustedes llaman Dios— grita una voz burlezca desde fuera de la iglesia. Con el simple hecho de escucharla Alicia podía adivinar quien era su dueño
—¿quien es ese blasfemo…? — pregunta con indignación uno de los creyentes aún presentes dentro de la iglesia
— Bartolome…—dice sorprendida Alicia al escuchar esta declaración mientras intenta tapar los oídos de la pequeña Susan
—¿lo conoces…? — pregunta el padre Joshua sin alterarse por las palabras dichas por Bartolome
— se podría decir que si… — contesta Alicia avergonzada
— ya veo — contesta el padre Joshua sonriendo mientras sale de la iglesia para ver al joven que lanzó tal declaración — bienvenido joven, siéntete libre de ingresar a mi iglesia, un amigo de Alicia siempre tendrá un lugar en mi rebaño — indica el sacerdote con calma. Lleva años desempeñando el trabajo de sacerdote y no es la primera vez que se encuentra con un no creyente, unas simples palabras blasfemias lanzadas al azar no pertubaran su mente.
—¿ingresar a tu iglesia…? — repite Bartolome incrédulo para posteriormente reír frenéticamente
— cretino… — dice uno de los testigos allí presentes al ver la actitud del joven
— tranquilos — indica el Padre Joshua con una sonrisa a sus fieles mientras mira a Bartolome con calma — seguramente algo de lo que dije le pareció gracioso a este joven — indicó sin odio alguno en sus palabras
— perdón por reírme — contesta Bartolome secándose una pequeña lagrima de su ojo que broto de tanto reír — nunca pensé que un miembro del clérigo me diría esas palabras a mi— explico recuperando su tez serena — aunque agradezco su invitación padre Joshua no creo que el dueño de este templo esté feliz de recibirme — indicó
— tonterías, estar encantado de recibirte a ti o a cualquier otro chico perdido y sin credo en mi iglesia — indicó el anciano con calma
— no se ofenda padre, pero no me refería a usted cuando hable de dueño, me refiero al ser que llaman Dios— respondió Bartolome con calma
— tonterías, el amor de Dios está disponible para todos los seres humanos de este mundo que este dispuesto a aceptarlo — contestó el padre Joshua sin perder la compostura
— ¿para todos los seres humanos? Siempre me ha parecido curiosa esa declaración en muchas religiones. Declaran que todos los seres humanos serán amados por Dios siempre y cuando lo acepten, pero en esa declaración siempre dejan fuera a todos los demás seres de la creación ¿que les hace pensar a los humanos que sólo ellos son dignos del cielo? Es decir, estuve presente en la creación de la mayoría de las religiones y nunca entendí este punto— contesta Bartolome en tono pensativo
— ¿presente…? — repite Joshua extrañado por primera vez al no entender esta declaración
— es curioso como los humanos han creado diferentes credos a lo largo de su historia. Cuando aquel santurron explicó las leyes morales de este mundo a los primeros mortales estoy seguro que nunca considero que unos simples comandos terminarían convirtiéndose en diferentes conceptos espirituales. No me atrevería a decir que dogma es correcto ya que hoy en día cada religión diferentes posee argumentos correctos e incorrectos en cierta medida — añadió Bartolome
— es suficiente — dijo uno de los oyentes fieles a la iglesia del padre Josua —no quería decir nada por respeto al padre Joshua, pero cuestionar nuestra religión delante nuestro es algo que no permitiré — añadio molesto
—¿criticar su religión? Por lo visto escuchas sólo aquello que quieres oír e interpretas del modo que deseas hacerlo. Hable de las religiones en general, sin intención de criticar alguna en específico — contestó Bartolome riendo con cierta burla — creer que sólo tú ideología espiritual es correcta nubla tu mente. Pensar que al criticar la religión estoy hablando de la tuya específico indica que no consideras otras dogmas correctas y lamento infórmate que eso se considera parte del pecado de la soberbia — explica el joven mirando la expresión de Joshua que parece estar tranquilo a diferencia de los demás presentes quienes poseen una mirada de indignación
— Bartolome es suficiente — exclama Alicia al ver que las palabras del joven incomodaban a los demás
— ¿suficiente…? Estas fieles ovejas vienen cada semana a este lugar con el objetivo de ganarse un lugar en el cielo a través de su religión, pero el día en el cual un erudito del tema está dispuesto a darles consejos reales de como ganarse un puesto ¿me dices que pare? No me hagas reír — exclama Bartolome subiéndose al capot de su vehículo con calma para mirar desde lo alto a los creyentes molestos y decir — escucharme ovejas humanas, porque no lo repetiré dos veces. No importa cuánto vengan a este templo, no importa cuando recen, no importa que tanto sigan al pie de la letra los “consejos espirituales” escritos en sus libros de credo por monjes anticuados hace siglos; si todo lo que hacen para ser devotos a su religión no lo hacen por propia voluntad y con integridad, nunca llegarán al cielo. El infierno está lleno de gente creía ser un individua ejemplar según los estándares de su religión, pero que nunca hizo buenas acciones reales para demostrarlo. Si vienen a esta iglesia o cualquier otro templo, independiente de la religión de este, pensando que por hacerlo tendrán el cielo asegurado déjenme decirle que están perdiendo su tiempo, incluso un ateo de buen corazón tiene más posibilidades de tener un puesto asegurado que un creyente obligado — indicó el joven dejando a todos en silencio mientras intentaban digerir lo que escucharon
—explendido, muy bien explicado—intervino Joshua aplaudiendo rompiendo con tranquilidad el silencio que se genero — aunque no profesas mi religión es grato ver que por lo menos entiendes el concepto detrás de ella, se nota que has estudiado la espiritualidad humana. Gracias por aportar con tu conocimiento a mis humildes ovejas — añadió sin malicia algún, aunque era un sacerdote y seguía un culto específico nunca estuvo cerrado de mente a los aportes espirituales que otra persona podría darle, sin discriminar por la edad o el credo de este individuo
— es innecesario que me agradezca padre, lo hice por beneficio propio — indicó bajando de su vehículo para luego acercarse a Alicia — como dije el infierno ya está lleno de creyentes obligados. No quiero seguir recibiendo más extremistas religiosos que cuestionan a cada segundo el porque fueron a parar a mis dominios. Es hora de que el cielo se haga responsable de los pequeños monstruos que crearon — indicó finalmente.
Nota: perdonen la demora, he estado ocupado con la U 😪